Es la disciplina que permite abordar los desafíos relacionados con el cambio climático, los servicios ecosistémicos, la inseguridad alimentaria, la pobreza rural y los medios de vida de los agricultores. Promueve la diversificación de fincas y territorios por sus efectos agronómicos, ambientales y socioeconómicos positivos.
Construye la salud del suelo, protege el agua, la biodiversidad y la economía de fincas viables y resilientes. La agroecología ofrece herramientas para diseñar y manejar sistemas agrícolas que pueden resistir futuras crisis, ya sean brotes de plagas, pandemias, interrupciones climáticas o crisis financieras. Un cuerpo creciente de investigación ha demostrado una mejora medible en servicios ecosistémicos en fincas manejadas agroecológicamente en una gama de climas y regiones geográficas (M.Altieri)